Los Cedear son instrumentos que permiten invertir en pesos en activos que cotizan en Wall Street y otros mercados. Luego de las subas de 2021, los expertos sugieren ser selectivos para elegir nuevas alternativas
Los controles de cambio y el derrumbe que sufrieron las cotizaciones de las acciones de empresas locales tras la crisis de 2018-19 hizo que los inversores argentinos cambiaran sus preferencias a la hora de invertir en la Bolsa local. Un instrumento marginal, que permite invertir con pesos en acciones del exterior, pasó al centro de la escena y hoy opera más cantidad de dinero que las propias acciones.
Se trata de los Certificados de Depósito Argentinos (Cedear), que permiten invertir con pesos en acciones de empresas que cotizan fuera del país. Están respaldados por acciones de su mercado de origen y, al operarse en moneda local, sus precios se mueven al ritmo de las subas y bajas de la acción propiamente dicha pero a un tipo de cambio similar al contado con liquidación. Entonces, si bien son inversiones de riesgo como toda acción, tienen un componente de cobertura cambiaria ya que en caso de una suba de los dólares paralelos el valor en pesos del Cedear también avanza, aunque la acción de la empresa en cuestión se mantenga sin cambios en su plaza de origen,
En 2021, los Cedear arrojaron más que nada alegrías para sus tenedores. Sus avances, medidos en pesos, llegaron en algunos casos al 250% -como en el caso del Cedear de la brasileña Embraer- y, con bemoles, en todo el panel predominaron las subas dado el gran año que vivió Wall Street, donde están listadas la mayoría de las acciones que tienen Cedear, y la alta brecha cambiaria.
Claro que invertir en acciones siempre expone al riesgo de que un cambio en el contexto económico o un mal desempeño de la empresa que se eligió cause pérdidas. Y después de subas tan importantes en 2021, esas potenciales pérdidas se vuelven una posibilidad más analizada por los especialistas.
“Todos estamos tentados de seguir sumando dinero a este tipo de inversiones. ¿No están muy elevados los precios? ¿Es momento de entrar? Mi recomendación es ser muy selectivos, y no olvidar invertir en Cedears muy operados, con mucha liquidez”, advierte la asesora financiera Lucía Pignani.
Para empezar a diseñar una cartera de acciones del exterior, entonces, hay que partir de algunos supuestos que sustenten la estrategia. ¿Qué esperamos para 2022 en los mercados internacionales y, en base a eso, dónde conviene posicionarse?
“Las premisas que tenemos para 2022 son, una, el fin de la pandemia o al menos el fin tal como la conocemos porque la ómicron es una variante muy contagiosa pero de baja letalidad. Dos, una suba de la tasa de interés en EEUU. Tercero, que va a ser un año de crecimiento económico con buenas ganancias de las empresas y empleo recuperándose. Y el cuarto factor el tema de la inflación, que va a afectar a las valuaciones”, dijo Maximiliano Donzelli de IOL Invertir Online.
A partir de una serie de supuestos, el que hoy es el consenso de mercado, entonces se puede empezar a pensar qué se busca al invertir en Cedears. Un inversor más conservador se puede conformar con rendimientos esperados modestos más la cobertura cambiaria que ofrece el instrumento. Otro, más agresivo, quizás no tema la posibilidad de sufrir pérdidas con tal de apostar por la chance de ganancias más significativas. Y, en base a ello, elegir empresa por empresa.
La youtuber financiera Giselle Colasurdo prefiere, sobre todo para ahorristas sin gran experiencia en el mercado de capitales, un enfoque conservador.
“Empresas con negocios sólidos y estables en el tiempo, y que muestren una baja volatilidad, es decir, que no haya fuertes variaciones en el precio de la acción. Esto implica que cuando se gana se suele ganar poco, y cuando se pierde, también se suele perder poco, porque el foco está puesto en cuidar el capital”, dijo.
Cedears como el de Coca-Cola o McDonald’s ofrecen la posibilidad de aprovechar lo que promete ser un 2022 de regreso del consumo masivo, de la mano de la salida de la pandemia. Disney, siempre competitivo con sus contenidos de entretenimiento y con su división de parques de diversiones saliendo del golpe de la pandemia, es otra alternativa. Microsoft, con su crecimiento lento pero seguro, también aparece como opción atractiva. Y, por último, el Cedear de Berkshire Hatthaway -la empresa del legendario Warren Buffet- es casi una estrategia de diversificación en sí misma: se apuesta porque el fondo gane en sus múltiples inversiones.
Para un perfil conservador, Pignani coincide en buscar Cedear de empresas muy asociadas a la marcha de la economía estadounidense y al consumo masivo.
“Coca-Cola, Walmart, Johnson & Johnson, Procter & Gamble, son Cedears defensivos que permiten surfear la volatilidad del mercado y si bien no se va a gozar de grandes ganancias, se puede aspirar a un año tranquilo”, dijo. Para un perfil agresivo, mientras tanto, empresas como MercadoLibre -que sufrió grandes bajas en los últimos meses- 00000 y Boeing, otro sector que trata de sacudirse el polvo de la pandemia, son alternativas.
Por último, Donzelli se inclina por una cartera combinada. En la que las acciones más estables sostienen la apuesta mientras que las potencialmente más volátiles buscan darle posibilidad de ganancias mayores.
“Estamos privilegiando empresas de valor con baja volatilidad, por un lado, tecnológicas con buenos resultados, por el otro, y por último al sector energético”, comentó.
“Empresas de valor como Berkshire Hatthaway, Walmart o Merck porque son las que mejor se comportan en contexto de subas de interés, son empresas menos sensibles que las empresas de crecimiento. Tecnológicas porque si bien las de valor son menos volátiles, las tecnológicas dan el empuje para un mejor resultado, en ese sentido pusimos empresas que no estén en valores altos como Google o puede ser Microsoft. Y por último hay una falta estructural de oferta de energía y Exxon Mobile es una empresa muy sólida, con muy buena caja, y nos gusta para este año”, concluyó.