Bank of America distribuyó un informe optimista sobre Argentina, destacando una “oportunidad de oro” para reformas cambiarias y recomendando invertir en el país. El equipo de analistas prevé cambios importantes en las políticas del gobierno entre septiembre y diciembre
El gigante de Wall Street, Bank of America (BofA) sorprendió a los inversores con un informe positivo sobre la situación en el mercado de Argentina. El documento, elaborado por un equipo de analistas liderado por Carlos Capistrán, economista jefe para América Latina y Canadá de BofA Global Research, sostiene que se avecinan importantes reformas cambiarias en el país sudamericano. Estas previsiones coinciden con un contexto de reducción de impuestos a las importaciones y la posibilidad de ajustes en el tipo de cambio oficial, lo que podría mejorar la competitividad del peso argentino.
El equipo de BofA destaca que, aunque el consenso general del mercado es que no habrá cambios inmediatos en la política cambiaria, su análisis sugiere lo contrario. “Creemos que existe una oportunidad de oro para que el gobierno realice reformas cambiarias entre septiembre y diciembre, coincidiendo con la reducción de los impuestos a las importaciones” (la baja del Impuesto PAIS), afirmaron en el informe. Este cambio podría ser clave para mejorar la situación económica del país sin generar un aumento significativo en la inflación.
El informe sugiere que, si el Gobierno compensa la reducción de impuestos con una suba del tipo de cambio oficial, se lograría hacer más competitivo al peso, lo que beneficiaría a los exportadores. Al mismo tiempo, esta estrategia podría evitar un impacto negativo en la inflación, que sigue siendo uno de los problemas más graves del país. “La reducción de impuestos a las importaciones, si se compensa adecuadamente, no implicaría una devaluación en los precios finales de importación”, señalaron los analistas.
BofA sostiene que el gobierno argentino tiene incentivos para no revelar su estrategia cambiaria antes de tiempo, con el fin de evitar movimientos especulativos en el mercado. Sin embargo, el banco también advierte que no realizar estos ajustes podría ser contraproducente. “Podría ser perjudicial abaratar las importaciones justo cuando el gobierno necesita acumular reservas para cumplir con los pagos de deuda y las metas del FMI”, aclaran los expertos. En este sentido, la expectativa de BofA es que el gobierno finalmente opte por una corrección cambiaria moderada que mantenga el equilibrio macroeconómico sin caer en una devaluación abrupta.
El contexto político también juega un papel crucial en las expectativas de BofA. Los analistas señalan que la administración actual demostró mayor capacidad de gobernabilidad de lo que muchos esperaban, lo que ancló el precio de los bonos a la estabilidad fiscal. “Aunque reconocemos que las políticas cambiarias del gobierno generan dudas, creemos que los precios de los bonos deberían estar anclados por el éxito del gobierno en otras áreas, como el ajuste fiscal agresivo, la desaceleración de la inflación y la recuperación de la actividad económica”, detalla el informe.
Los bonos argentinos demostraron un desempeño notable en los últimos meses, y BofA es optimista sobre su futuro. En su análisis, el banco asegura que el mercado está subestimando el potencial de los activos argentinos, especialmente en un escenario donde las reformas cambiarias y fiscales sigan adelante. Este optimismo se refleja en la recomendación de BofA de mantener una posición “sobreponderada” (overweight, jerga para comprar, en oposición a underweight -vender- y marketweight -mantener) en bonos argentinos, ya que “el riesgo de políticas cambiarias adversas parece compensado por los avances fiscales”.
Además, el informe enfatiza que la implementación de un paquete de reformas fiscales y el incremento de impuestos demuestra la capacidad del gobierno para gestionar los desafíos económicos. Esto mejoró las expectativas del mercado.
El optimismo de BofA no se limita al mercado de bonos. El banco también recomienda incrementar la exposición en acciones argentinas, un cambio notable respecto a su posición anterior. “Ahora estamos sobreponderados en Argentina, ya que somos más constructivos en cuanto al panorama macroeconómico”, indica el informe. Este cambio de estrategia se debe en gran parte a las expectativas de que el país logre estabilizar su economía en los próximos meses.
En términos de sectores específicos, BofA se muestra optimista sobre los bancos y las empresas orientadas al consumo interno en Brasil, mientras que en Argentina su apuesta es más amplia, considerando la posibilidad de que las reformas cambiarias mejoren las condiciones macroeconómicas en general.
Riesgos
A pesar de su optimismo, BofA reconoce que existen riesgos significativos para la economía argentina. El principal de ellos es la posibilidad de que el gobierno no logre implementar las reformas necesarias o que estas se realicen de manera incompleta.
Además, el documento señala que una desaceleración en la economía de Estados Unidos podría tener un impacto negativo en América Latina, incluida Argentina. Según los participantes en la encuesta de gestores de fondos de BofA, el riesgo de una recesión en Estados Unidos es el mayor desafío para la región. Sin embargo, en el caso de Argentina, los analistas consideran que las reformas cambiarias podrían mitigar parte de este riesgo, al proporcionar un impulso adicional a la competitividad de las exportaciones.