La divisa subió porque bancos deberán devolver $ 300.000 millones en Leliq
Esta vez el Banco Central no sólo no tuvo que salir a vender dólares, sino que soportó una disparada inicial de la divisa de casi $1 cuando el dólar mayorista tocó $38,60.
La reacción tuvo como punto de partida una medida del Banco Central que limitaba el accionar de los bancos para evitar los capitales golondrinas, lo que provocó una fuerte disparada del dólar mayorista, que alcanzó a tocar $38,60. Luego comprendieron que estaban sobre reaccionando, que hay demasiada tensión en el aire que provoca coberturas exageradas.
Pero también sirve para tener en cuenta un dato: hay una sensibilidad muy alta alrededor del dólar. Cualquier ruido espanta y lo que pasó a inicio de la rueda fue una prueba de este temor. Los tenedores de pesos que se están jugando a las tasas ahora sienten que caminan por terreno minado, aunque con los ánimos más calmados el dólar mayorista cerró a 11 centavos más que el viernes a $37,97.
En bancos y casas de cambio, el público pagó el dólar 17 centavos más caro a $39,07. El «blue» fue el más solicitado porque ya hay inversores buscando cobertura ante las medidas del Central. Aumentó 50 centavos a $37,75.
Las reservas perdieron USD 109 millones. Quedaron en USD 66.783 millones. Por la fortaleza del dólar en el mundo y la caída del oro, se perdieron USD 188 millones y se pagaron 2 millones a organismos internacionales y 3 millones a Brasil.
A los bancos la medida que dispuso Guido Sandleris, presidente del Banco Central, les cayó como un balde de agua fría porque deberán devolverle a la entidad monetaria, a cambio de pesos, las Letras de Liquidez excedentes, es decir, todo lo que supere su patrimonio o tenencias de plazos fijos.
De acá a abril los bancos van a tener que devolver alrededor de $300 mil millones de Leliq y el Central les entregará pesos. Son Letras por las que pagaron tasas más elevadas de las que le va a pagar el Banco Central cuando se las reclame. Pero el balance los favorece porque desde acá a abril ganarán mucho dinero.
A todo esto, el Central licitó Leliq por $190 mil millones, por las que pagó una tasa promedio de 45,16%, que equivale a 1,08 puntos menos que el viernes y quitó de circulación $ 8.369 millones. La tasa ya está en el mínimo. Los ahorristas están recibiendo de los bancos una tasa de 36% anual por plazos fijos y la comparan con una inflación esperada de 33%.
Por otra parte, la intención del Central es que el dinero que le devuelve a los bancos se traduzca en préstamos a menor tasa al sector privado. Una jugada que tiene beneficios para la actividad económica pero deja colgados a los que tomaron préstamos a tasas superiores a 50% anual.
Pero también hay riesgos: ¿Los que se hagan de pesos volverán al plazo fijo o dolarizarán su cartera?
El mundo no ayuda. La cautela siguió dominando a los Estados Unidos y el efecto cascada golpea a la Argentina. Los bonos del Tesoro de Estados Unidos siguieron subiendo y esto hizo que aumentara 0,59% a 679 puntos el riesgo país argentino.
Wall Street hoy es «ni». No se conmueve ni por los buenos balances. El 1 de marzo es la fecha que pende sobre el cuello de los inversores como una guillotina. Si ese día no hay acuerdo por los aranceles entre Estados Unidos y China, los mercados la van a pasar mal y la actividad económica mundial caerá. No hace falta explicar cómo puede afectar a la Argentina y a sus bonos semejante escenario.
La Bolsa, en tanto, comenzó el día con euforia. Creía que podía revertir las últimas caídas ayudada por los bancos y el sector energético. Fue así como el S&P Merval de las acciones líderes a las 11.30 subió hasta casi 2% pero a partir de allí comenzó una caída que las volteó a -0,21%. Después del golpe, llegó la cautela y comenzó una recuperación lenta, con algunos serruchos bajistas, que le permitió terminar la rueda con un aumento de 0,98%, pero con un dato que no lo favorece: los últimos minutos fueron de fuerte caída.
A las 16.43 la bolsa estaba 1,47% arriba. De todas maneras, el monto de negocios fue modesto: 486 millones de pesos.
Los bancos, que estuvieron casi toda la rueda en alza, se dieron vuelta por la medida que tomó el Central y terminaron en territorio negativo o con leves subas. Banco Macro cerró con un aumento de 0,44%, pero Francés, que estaba casi 2% arriba, cerró 0,39% abajo. El de mejor performance fue Galicia (+1,75%).
Lo más destacado fue Pampa Energía (+6,22%) seguida por Transportadora Gas del Sur (+5,07%) y Central Puerto (+3,71%).
Los ADR’s argentinos -certificados de tenencias de acciones que cotizan en Wall Street- tuvieron un día positivo. Despegar subió 5,04% y Transportadora Gas del Sur, 2,70 por ciento.
En la próxima ronda se sabrá si sigue la tendencia alcista del dólar. Es probable que el Central no tenga que comprar divisas y que las bolsas mantengan la cautela.