Luego de la euforia bursátil de enero y febrero, donde los montos negociados marcaron récords, marzo se caracterizó por la disminución de las operaciones
El Merval cerró marzo con bajo volumen operado en acciones. En promedio, los negocios en renta variable cayeron unos $ 200 millones, es decir, un 20% con respecto a febrero. La volatilidad externa durante el mes, sumada a la inestabilidad del dólar y los cambios en las metas de inflación fueron los principales factores que explicaron esta dinámica.
El monto promedio operado en acciones durante el tercer mes del año fue de $ 812 millones o u$s 40 millones. La cifra es sensiblemente menor a los récords de enero y febrero. El volumen promedio operado en el primer mes del año había sido de $ 1039 millones (u$s 55 millones). Febrero, por su parte, registró negocios promedio por $ 1004 millones (u$s 54 millones).
«Enero fue una fiesta bursátil en el mundo y Argentina se acopló a eso pero, en paralelo, se veía que el riesgo país subía. Febrero fue muy volátil, con un inicio muy feo y una recuperación en la segunda mitad del mes. Marzo fue decididamente malo», resumió Diego Martínez Burzaco, de MB Inversiones.
Desde que empezó la baja en los mercados internacionales, a fin de febrero, los inversores adoptaron una posición de «wait and see» y los montos negociados bajaron hasta tocar mínimos de $ 466 millones en la rueda del 7 de marzo. «Se perdió un poco el interés por Argentina pero tampoco hubo una ola de ventas importante. El mercado se viene desangrando de a poquito», afirmó el Licenciado en Finanzas Juan Manuel Palacio.
Lucas Gardiner, director de Portfolio Personal, coincidió: «No hay muchas órdenes de venta pero tampoco hay ingresos nuevos. La gente que tiene posiciones no está desarmando sus carteras. El bajo volumen tiene que ver más que ver con la volatilidad de afuera, que generó un poquito de incertidumbre y cautela. Eso se sumó a que a fines de febrero hubo una caída fuerte en el S&P».
Los montos diarios operados fueron muy dispares en marzo y, si bien se superaron los $ 1000 millones en 5 de las 20 ruedas que tuvo el mes, la mayoría de los días el volumen se mantuvo entre $ 500 y 600 millones. Sebastián Arena, de Bavsa, también señaló a los factores externos como fundamento principal de la baja del volumen: «El temor a un ajuste hizo que varios dejaran de pagar acciones. Por momentos, parece que Argentina se va del radar de los inversores extranjeros y que Brasil tiene más potencial para muchos».
En el frente interno, tampoco hubo buenas noticias en marzo. «El desencanto por los activos argentinos comenzó a fin de diciembre. La modificación de las metas fue vista por los inversores como una señal de que la política metió la cola en el Banco Central, que era el ancla para controlar la inflación», sostuvo Martínez Burzaco. Por su parte, Sebastián Arena agregó que «muchos están asustados por eventuales ventas de la cartera de Anses».
El dato de volumen operado es importante en tanto habla de la profundidad del mercado local y la posibilidad de mover capitales con libertad. En ese sentido, la cantidad de negocios es una de las cuestiones que MSCI tendrá en cuenta al momento de decidir la recategorización del mercado local como emergente, que se hará a mediados de año. Argentina aún se encuentra muy lejos del volumen operado en países emergentes de la región. Colombia, por ejemplo, negocia en promedio de u$s 1000 millones diarios en acciones y Chile está cerca de los u$s 2000 millones por día. De todos modos, los especialistas esperan que la cantidad de negocios en la bolsa doméstica mejore a medida que se calmen los mercados internacionales y se den algunas variables locales, entre ellas, la aprobación de la Ley de Mercado de Capitales.