El cepo importador volvió a la normalidad y obligó ayer al BCRA a vender entre u$s 50 y u$s 85 millones para cubrir la demanda. El dólar oficial ganó seis milésimas a $ 8,672
El Banco Central (BCRA) terminó de devolver al status quo previo el mercado cambiario mayorista y debió vender divisas de sus propias arcas para satisfacer la demanda de importadores. En dos días, la entidad conducida por Alejandro Vanoli debió vender entre u$s 70 y u$s 100 millones tras abandonar el parate absoluto a las ventas a importadores que impuso durante tres ruedas consecutivas de la semana pasada. El dólar, por otra parte, subió seis milésimas hasta los $ 8,672 por unidad y el blue se mantuvo estable en $ 13,18.
Durante los últimos tres días de la semana pasada las autorizaciones de pagos de importaciones se redujeron a cero, en una serie de ruedas en las que Vanoli intentó recuperar el control del mercado cambiario ante el efecto en reservas de la creciente demanda.
Esas trabas a los pagos de de importadores en el mercado mayorista parecieron quedar en el pasado ayer a ojos de los operadores cambiarios. Ayer, el BCRA autorizó operaciones normalmente –o al menos en la misma medida en que lo hacía una semana atrás– y el mercado cambiario recuperó su nivel de actividad.
Ayer se operaron u$s 284 millones en las dos plazas mayoristas locales, con el BCRA como uno de los principales oferentes de divisas.
«El Banco Central se transformó nuevamente en el principal abastecedor de una demanda que careció de una contraparte del lado privado que relevara a la autoridad de control del papel de vendedor casi exclusivo en la rueda de hoy (por ayer)», contó un corredor cambiario en un informe para sus clientes.
Fuentes del BCRA calcularon en u$s 50 millones el saldo negativo que sufrió la entidad al verse obligada a vender dólares de sus reservas para satisfacer la demanda. En el mercado, en cambio, estimaban las ventas oficiales en u$s 85 millones.
«En estos días están entrando divisas de liquidaciones de exportaciones de mineras pero no es suficiente porque hay compras que no se hicieron la semana pasada que se concretan ahora y porque las liquidaciones de cerealeras están muy fuertes», dijeron en la mesa de una banco privado.
La rueda del lunes, cuando el BCRA debió vender u$s 20 millones, había sido el inicio de la vuelta a la normalidad bajo cepo cambiario. Ese día, según bancos privados, la entidad movió a u$s 100.000 el monto mínimo a partir del cual todas las operaciones de compra de divisas necesitan de la consulta previa a la autoridad monetaria, desde el anterior piso de u$s 150.000. El BCRA negó este cambio.
Ayer, ese nivel de radar a partir del cual las compras son revisadas fue de u$s 150.000. Lo que quedó tras la asfixia a importadores fueron nuevas normas de informar con antelación las compras con carta de crédito, que se tramitan en forma automática y que fueron usadas para evadir los controles.
«La opinión acá es que con más de tres años de cepo, de vez en cuando hay que barajar y dar de nuevo porque todo el mundo le toma el tiempo al BCRA y aprende como comprar divisas sin pasar por su filtro. Al frenar todo, pudo volver a armar un colador más fino», dijo un operador bancario.
Los tres días de parate también le sirvieron al BCRA para hacer compras por alrededor de u$s 160 millones. Eliminadas esas trabas la autoridad monetaria vendió en dos ruedas entre u$s 70 millones, según fuentes oficiales, y u$s 100 millones, según fuentes del mercado.
Las reservas del BCRA ganaron ayer u$s 25 millones a pesar de las ventas y quedaron en u$s 31.306 millones. Para los próximos días se espera el ingreso de u$s 278 millones de financiamiento chino par obras de infraestructura y de u$s 500 millones de una emisión de deuda que concretó YPF.