Desde hoy la indexación mensual de las bandas de piso y techo será de 2% – La intención es que el esquema cambiario se extienda, al menos, hasta junio. Dependerá de la inflación y del aval del Fondo Monetario Internacional.
La “zona de no intervención” ingresará desde hoy en su tercera etapa, que para los funcionarios del Banco Central debería ser la de consolidación. Los hombres y mujeres que trabajan con Guido Sandleris incluso garantizan que el esquema de política cambiaria puesto en funcionamiento a partir del acuerdo 2.0 firmado en septiembre con el Fondo Monetario Internacional (FMI), continuará al menos hasta junio; previa autorización en marzo del organismo que maneja Christine Lagarde. Desde hoy, y por un trimestre, la indexación del piso y el techo de la Zona, pasará del 3% que rigió hasta el 31 de diciembre pasado, a 2% mensual, achicando el margen de acción de la autoridad monetaria y acompañando una necesaria reducción en los índices de inflación según la medición del Indec. En este sentido desde el Banco Central hay un moderado optimismo a partir de los primeros datos que llegan a la entidad, correspondientes a diciembre y que podrían arrojar un alza de los precios de hasta 2%. En la Casa Rosada hay convencimiento que la invención de la “zona”, es el mayor logro de estabilización cambiaria del gobierno de Mauricio Macri, luego de los primeros años de gestión de seguimiento de la evolución monetaria y la polémica intervención de Luis Caputo de agosto pasado. Dentro del ala política oficial se habla incluso de la adopción del concepto de la “zona” como uno de los aportes del equipo económico a la campaña electoral. Se recuerda que, luego de un comienzo de dudas (nunca el organismo internacional es amigo de los esquemas fijos o con indexaciones pautadas), el FMI se convenció de las bondades del esquema al ver que servía como estabilizador de las expectativas devaluatorias criollas. La cucarda final fue recibida por el propio Macri cuando recibió en la primera semana de diciembre pasado a Christine Lagarde en la cumbre del G-20 de Buenos Aires. Esa bendición cobró un valor agregado al mencionar que Lagarde no estaba convencida del mecanismo y, durante las negociaciones de septiembre pasado, elegía una estrategia de liberación del tipo de cambio hasta que este encuentre su propio punto de equilibrio. El esquema de ajuste diario comienza con la cotización al 31 de diciembre de $37,117 para el piso y de 48,034 pesos para el techo. Al 31 de enero, la actualización llevará a un mínimo de 38,86 y un máximo de 48,99 pesos. Al 28 de febrero los montos serán 39,63 y 49,96 pesos; mientras que el cierre de las bandas al 31 de marzo (el último día hábil será el 29) será de $40,42 y 50,95 pesos de cierre. Todo este tiempo servirá en paralelo para que el BCRA vaya monitoreando las otras dos variables clave de la política monetaria y cambiaria: la evolución de la inflación mes a mes y, en consecuencia, la política diaria de tasas de interés de Leliq. En este último punto, desde el ala política del macrismo todo es expectativas positivas y entusiasmo en que en el primer trimestre la tasa lleguen al 40%. En la entidad sólo hay prudencia y defensa a rajatabla del “paso a paso”.
La Zona tuvo ya dos etapas desde su puesta en funcionamiento desde octubre del año pasado. La primera duró un mes y fue su puesta a prueba. La segunda comenzó en noviembre y terminó en diciembre y se trató del proceso de ajustes y, especialmente, calibración en los momentos en que la divisa amagaba llegar al piso de referencia. En ambas etapas lo que se resalta en el mercado financiero es que la cotización siempre se mantuvo más cerca de la banda mínima que del techo; lo que, tres meses después de comenzado el esquema, logró dar la sensación de estabilidad de control del tipo de cambio luego de los tumultuosos meses que siguieron al comienzo de la crisis financiera de abril.
Fuente: https://www.ambito.com/zona-no-intervencion-ingresa-tercera-etapa-n5008350